Louis Vuitton nació el 4 de agosto del año 1821 en Anchury, cerca de las Montañas de Jura, Francia.
A los 14 años, Louis se fué a Paris, y en 1837, luego de dos años, llegó a la Ciudad Luz, donde trabajó como aprendiz de un fabricante de cajones.
La historia de los viajes siempre ha estado vinculada a este legendario francés.
Su enfoque visionario del diseño de piezas de equipaje no tenía rival durante sus días.
Empezó a fabricar valijas en París en 1854, y la compañía que empezó se convirtió en una de las más famosas marcas de accesorios de lujo del mundo en su mayor parte por los bolsos con su monograma “LV”.
Empezó a fabricar valijas en París en 1854, y la compañía que empezó se convirtió en una de las más famosas marcas de accesorios de lujo del mundo en su mayor parte por los bolsos con su monograma “LV”.
Sus piezas fueron un éxito y mudó su compañía a Asnières en 1860. Conforme pasaron los años la línea Vuitton ganó reconocimiento internacional en parte gracias a una medalla de bronce que gano en la World´s Fair en 1867 y una de oro en 1889, las 2 en Paris.
Un buen ejemplo de ello es que en 1875, el modisto Charles Frédéric Worth le divulgó a Louis un importante secreto del negocio: las fundas de crinolina y carne de cordero pronto darían origen a materiales más suaves.
Louis Vuitton respondió a esta información añadiendo a su colección de baúles uno con espacio para colgar y varias gavetas, el cual se convirtió en el famoso Guardarropa, la primera pieza de mobiliario utilizada para viajar.
Además se le conoce por la gran industria que empezó en bolsas de mano, perfumes, ropa, libros y zapatos y joyas.
La compañía es dirigida por el grupo LVMH, cuyo presidente es Bernard Arnault.
A su vez, la empresa está gestionada por Patrick Louis Vuitton, que junto a diseñadores de talla internacional como Marc Jacobs ha logrado mantener la asociación de la empresa al lujo y la exclusividad.
Louis Vuitton acaba de presentar una nueva colección de alta joyería que nos hace pensar en la aristocracia de toda la vida.
La Colección Blason, diseñada por Pharrel Williams y Camile Miceli.
Este anillo, de sello extragrande giratorio, exhibe el blasón LV en una de las caras, y un impresionante recubrimiento de diamantes en la otra (94 diamantes).
Podés elegir también la versión en oro blanco y rodio negro con un diseño gráfico, aunque el logo en este caso no es giratorio. Eso sí, tenéis los gemelos a juego.
El anillo en tonos rosas esta impresionante: 101 zafiros rosas engastados, con el blason LV en oro amarillo. Y los pendientes también a juego, con 384/420 zafiros incrustados.
El complemento adicional a esta colección de zafiros lo representa este colgante con 88 zafiros rosas, junto con el brazalete pequeño con 220 zafiros.
Y por último, pero ni mucho menos sin importancia, este pequeño anillo en oro amarillo mate con el blasón LV como marca característica de la colección.
Y por último, pero ni mucho menos sin importancia, este pequeño anillo en oro amarillo mate con el blasón LV como marca característica de la colección.
Los pendientes siguen la misma línea, pero la novedad llega con el brazalete grande.
El blason monogram sí es giratorio y cuenta con 94 diamantes blancos. El brazalete pequeño se presenta en oro amarillo y con los grabados LV a la vista.
El pasado 3 de julio Louis Vuitton inauguró su primera tienda dedicada a sus colecciones de alta joyería y relojería, así como su primer taller de alta joyería, en el número 23 de la Place Vendôme.
El espacio se encuentra a tan solo unos metros de 4, rue Neuve des Capucines, la histórica dirección en la que Louis Vuitton estableció su primera tienda en 1854.
Toda la excelencia del know-how de Louis Vuitton estará presente en los nuevos talleres de alta joyería de la Maison, ubicados en el ático de un elegante edificio del siglo XVII donde todavía se encuentran los antiguos bancos de trabajo en los que se han sentado numerosos maestros joyeros generación tras generación.
Toda la excelencia del know-how de Louis Vuitton estará presente en los nuevos talleres de alta joyería de la Maison, ubicados en el ático de un elegante edificio del siglo XVII donde todavía se encuentran los antiguos bancos de trabajo en los que se han sentado numerosos maestros joyeros generación tras generación.
Entre las paredes de este taller, guardián de una tradición preciosa, Louis Vuitton ha creado una luminosa y contemporánea vitrina con una magnífica vista sobre la elegante Place Vendôme.
El nuevo espacio será fuente de inspiración para los maestros que allí trabajen, cuya artesanía perpetuará la excelencia de la tradición de la Maison, así como la audacia de su innovación.
Piedras preciosas de todo el mundo terminarán sus respectivos viajes en el taller, entre expertas manos que extraerán toda su luz, dotándolas de una nueva vida radiante y engarzándolas en brillantes joyas.
Aquí se crearán piezas excepcionales que retomarán y celebrarán la continuamente renovada leyenda única de “L’Ame Du Voyage” de Louis Vuitton.
Fernando Gatto
Kaia Joyas Uruguay
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