LA GENERACIÓN Z Y LOS DIAMANTES

Cómo venderle a la Generación Z un anillo de compromiso con diamantes naturales

Los minoristas expertos están ayudando a los clientes más jóvenes a ver los beneficios de elegir diamantes naturales para los anillos de compromiso.

Los comerciantes que dicen que los diamantes cultivados en laboratorio todavía tienen una ventaja sobre las ventas de diamantes naturales entre la Generación Z probablemente no hayan hablado con los minoristas con los que hablamos para este artículo, muchos de los cuales informan algo muy diferente. Muchos comerciantes de todo el país están sosteniendo pacientemente las manos de los compradores de anillos de compromiso por primera vez de hoy, los hijos de la Generación X, para explicarles los beneficios y las oportunidades de comprar un diamante formado en la tierra. 

Extraído versus fabricado

Sin duda, la generación Z es inteligente en cuanto a tecnología, ha investigado mucho y, al igual que los millennials antes que ellos, se preocupa por comprar joyas que respeten el planeta. 

Pero a veces necesitan ayuda para entender las sutiles diferencias entre un diamante que proviene de la tierra y uno que se fabrica en una fábrica.

La mayoría de los compradores pueden haber oído hablar de los diamantes cultivados en laboratorio, pero no piensan en la diferencia entre ellos y los diamantes extraídos.

Los diamantes extraídos de minas y los cultivados en laboratorio pueden ser química y ópticamente iguales, pero su formación genera muchas diferencias que requieren una explicación. 

El primer producto, cuando se obtiene de manera responsable, alimenta a familias y educa a niños en destinos remotos que carecen de muchos recursos, mientras que el segundo no es necesariamente el producto ecológico que muchos han presentado.

Si la industria de los diamantes creara más anuncios publicitarios que mostraran los beneficios que aportan los diamantes naturales, tal vez más compradores se sumarían a la tendencia y comprarían un diamante natural de medio quilate en lugar de uno de dos quilates fabricado químicamente.

Además, la fabricación de diamantes cultivados en laboratorio puede estigmatizar las ventas. 

Algunos novios se preguntan qué dirán sus familiares, amigos y su amada si les proponen matrimonio con un diamante cultivado en laboratorio. 

En las zonas especialmente conservadoras del país, los diamantes cultivados en laboratorio siguen siendo menos apreciados. 

Los diamantes extraídos de minas son una tradición que nunca desaparece.

Algunos hombres creen que están engañando a su prometida si le compran un diamante cultivado en laboratorio, que ella merece uno natural.
Algunas parejas eligen diamantes extraídos de minas porque creen que los cultivados en laboratorio no son reales porque no provienen de la tierra.

Valores y otras diferencias explicadas

La mayoría de los vendedores de anillos de compromiso dicen que los clientes de la Generación Z entran a las tiendas con la conciencia de que existen tanto diamantes cultivados en laboratorio como diamantes naturales, y que si las novias no están obsesionadas con una piedra central más grande, las parejas probablemente comprarán diamantes extraídos. 

Dado que los diamantes cultivados en laboratorio son un producto artificial que mejora con la evolución de la tecnología, su valor es menor que el de sus contrapartes naturales. 

Los compradores pueden obtener un diamante cultivado en laboratorio más grande que uno extraído por su dinero, pero el valor de reventa y de intercambio es inexistente.

La Generación Z quiere valor a largo plazo.

Yo preferiría vender únicamente diamantes extraídos de minas, pero informo a los compradores sobre ambos. 

Los diamantes naturales no están al alcance de todos, pero les explico el valor monetario: los diamantes de la tierra valen lo que pagaste o más, pero no los cultivados en laboratorio.

Para dejar en claro ese punto, se les cuenta a los compradores sobre el primer año que compró diamantes cultivados en laboratorio. 

Una piedra suelta por la que pagó $2,800, ahora puede conseguirla por $300. 

Nos centrammos en educar a nuestros clientes de la Generación Z para ayudarlos a tomar las mejores decisiones para sus presupuestos, nos aseguramos de mostrar las diferencias entre las piedras en persona y no solo hablar de informes de laboratorio, es decir, las opiniones de otros.

Los diamantes tienen personalidad. 

Si estás eligiendo pareja, cada cada chica será diferente. 

Enseño a los compradores sobre el brillo y el corte, y comparo las piedras.

La generación Z llega con algunos conocimientos, luego el joyero necesita compartir su educación profesional para ayudarlos a refinar sus ideas.

Los diamantes naturales siempre han sido algo inalcanzable y lejano que se desea tener en mayor cantidad cuando se sea mayor y tenga más dinero. 

Es como si el objetivo final de la vida fuera tener un anillo o un collar de diamantes. 

Pero, al mismo tiempo, no importa demasiado si eso nunca sucede.

Poseer diamantes ya no es tan alarde como antes. 

La industria de los diamantes naturales ha tenido mala reputación últimamente, especialmente porque la sostenibilidad y la ética son uno de los principales impulsores del consumo en la generación. 

No creo que la generación Z entienda ni aprecie el valor y la belleza de un diamante natural, por eso ven que los diamantes cultivados en laboratorio se están convirtiendo en la nueva moda.

Afirman ser una opción más asequible y ética, ya que son física y químicamente idénticos a los diamantes naturales. 

Creo que incluso gente más joven, consideran que los diamantes naturales son demasiado caros. 

Todos apreciarían los diamantes como regalo, pero estarían más dispuestos a gastar su dinero en algo más reconocible por la marca.

¿Son todavía válidos los anillos de compromiso con diamantes?

El anillo de compromiso de diamantes nunca desaparecerá. Quizás prefieran algo más asequible con formas y colores más singulares como el anillo de esmeraldas y diamantes de Megan Fox, pero creo que el sentimiento significativo de un diamante siempre será simbólico. 

Si hay algo que le encanta a la generación Z, es la nostalgia.

¿Son las joyas una inversión?

No es una inversión tan grande como lo fue para sus padres porque esa generación no valora la calidad tanto como la de ellos. 

La generación Z no está ganando tanto dinero con el duro estado de la economía en este momento, por lo que siempre estan buscando una opción más económica, ya sean diamantes cultivados en laboratorio o aros de Amazon. 

Creo que la Generación Z quiere joyas que sean asequibles, sostenibles y que les duren mucho tiempo. 

Las principales marcas de lujo están intentando hablar con la Generación Z. 

¿Cómo ha sido la respuesta hasta ahora?

Las marcas de lujo que tienen un público de mayor edad y que llevan mucho tiempo en el mercado
ya tienen prestigio a ojos de la generación Z. 

Tiffany siempre será Tiffany, Cartier siempre será Cartier, pase lo que pase. 

Por eso, cuando comercializan directamente con los consumidores de la generación Z y utilizan plataformas como TikTok e Instagram, creo que dan la impresión de que se están esforzando un poco.

¿Cómo va a cambiar la Generación Z la industria?

Creo que la compra de piezas de joyería vintage aumentará drásticamente para esa generación, y apreciarán y valorarán esas piezas mucho más que hoy en día.

¿Qué debe hacer la industria del diamante natural para conectarse mejor con su generación?

La generación Z simplemente no sabe lo suficiente sobre los diamantes naturales como para poder apreciarlos. 

Si encontraran una manera de educar a la generación Z sobre los aspectos positivos de la industria de los diamantes naturales de una manera que les resultara atractiva, podrían conectarse mejor con esos consumidores más jóvenes.

Fernando Gatto

Kaia Joyas Uruguay